Los grupos concentrados van por las reservas del Banco Central

Los fugadores de dólares en el macrismo empujan por un shock devaluatorio gigantesco en el que los salarios caerían mas de un 100 por ciento. La operación de los medios es criticar la restricción cambiaria o cepo (una medida temporal de supervivencia y resguardo) para no decir que los salarios con la devaluación se desplomarían
Hacen subir dolar blue

Generando corridas cambiarias se busca disparar el dólar paralelo, ilegal, que el establishment suaviza como blue pero es negro de transacciones negras. De ese modo aumentan la brecha entre los distintos dólares y arrastran a la suba al oficial. Por lo tanto el Central saldría a vender sus dólares de reserva para mantener su precio y los compradores se los quedarían. A su vez, si el dólar sube su precio se traslada esa suba a todos los demás precios, el de la comida por ejemplo. Siempre la timba del dólar negro los empresarios la trasladan a los precios.
El gobierno trata de mantener las cotizaciones de los dólares pero incorporándoles impuestos para disminuir la brecha y desalentar la compra. De este modo comprar el dólar ahorro o solidario pasa a costar 10 pesos menos que el blue. Con esta medida resultan: por un lado no devalua y mantiene el dólar exportación a 79, aunque los sojeros quieran elevarlo a 145 (valor blue). Y por el otro desactiva a los financistas y ahorristas que compraban dólar solidario a 100 y lo vendían a 145. La bicicleta que antes se hacía con bonos, ahora se hace con el PURé; se compra en el legal y se vende en el ilegal Es decir, la “indignación” por el “cepo” es porque el Banco Central no permite con las reservas el negocio de varios vivos.

El problema y la pelea
Escasean los dólares en el país por la crisis económica nacional de endeudamiento (en el macrismo se fugaron más de 100 mil millones de dólares) y por la pandemia mundial.
Entonces aparece una pelea por quedarse con esos dólares. Los grupos concentrados quieren quedarse con la mayor parte posible y el gobierno quiere destinarlos para las reservas del Banco Central y a la inversión en la actividad productiva esencial en este momento. El estado debe intervenir para que esos dólares no se destinen a actividades superfluas. Por ejemplo, entre la producción de alimento o la importación de parafernalia de automóviles. O la timba de los especuladores que compraban a 100 en el mercado legal y vendían a 145 en el mercado ilegal.
La mentira base de la operación
Los medios y sus “especialistas económicos” siempre recurren a la frase “No genera confianza”, “Hay corrida por desconfianza”, “Los mercados no creen”, etc. Nada más falso.
El problema no es de confianza sino de intereses. Los mercados poseen intereses no sentimientos subjetivos de confianza, amor u odio. Dicen “No hay confianza” para no decir tienen otro interés, o no responde a sus intereses.
Que los especuladores tengan confianza es que un gobierno devalúe como ellos quieran o cobrar bonos al más alto precio. Con Macri tenían confianza, al principio no había cepo, y se permitía la compra de 2 millones de dólares diarios. Y así le fue al país. O la confianza es vaciar reservas y que quiebre el estado?. No hace un mes que se salió del default y ya se pretende la quiebra financiera del estado?

Destituyendo
La cuestión financiera se suma a la cuestión de la patronal rural que se queja por las retenciones, a la cuestión de la pandemia que cuestionan los anticuarentena, a la cuestión Vicentín, a la cuestión de rechazar la libertad legítima de Báez, a la cuestión sediciosa de la policía, entre otros. Todas situaciones atravesadas por la acción de los medios hegemónicos que motorizan el cuestionamiento al gobierno. Se busca debilitar al gobierno y condicionarlo desconociendo al justo ganador de las elecciones hace unos pocos 8 meses.
Optimizar “costo laboral” significa bajar salarios
Hay otras discusiones técnicas sobre la “Emisión”, la Inflación y el “Gasto Social o estatal” que ellos incorporan al déficit. El estado gastaría mucho en ayudar a los pobres cuando esos recursos podrían destinarse a hacer crecer sus empresas. Con esto buscan el ajuste del estado y de la vida cotidiana de los trabajadores. Lo que hicieron Menem y Macri y otros. Ya que se apunta a la baja de salarios en dólares. Porque los grupos concentrados plantean que en Argentina se pagan salarios altos y patronales de otros países pagan menos. Sacándoles ventaja.

Argentinos a Uruguay
El empresariado argentino siempre vivió del estado argentino. Jamás se iría porque no podría vivir de otro estado aunque se instalara allí. Jamás Techint se va a ir a Brasil, porque allí sería una simple Pyme que devoraría cualquier megaempresa brasilera. Los brasileros se comieron empresas argentinas afincadas aquí, de trasladarse allá se la apropiarían más fácil.
Tampoco a Uruguay, porque allí no tendría mercado ni capacidad productiva para exportar. Es todo falso. De ser cierto sería lo mejor para el país.
Lo único viable es algo que sucede hace mucho tiempo y es que los sojeros evaden impuestos y retenciones en plantaciones clandestinas en Uruguay y Paraguay y la medialuna fértil boliviana. Son facilidades que dan los países-estancia y sus gobiernos.
Por eso el discurso histérico del dólar agitado por los medios, se diluye enseguida para hablar de la sensiblería de los ricos y famosos que se van. Algo que incluso puede ser muy conveniente.
La economía no es un ente autónomo, los intereses más poderosos definen para uno u otro lado y es ahí donde el estado debe intervenir.